Un vino realizado con ella, el “Rouge Royal”, logró incluso un premio internacional en 1895

Racimo de uva gateta. Foto: Cedida por las bodegas Manuel Aragón

Texto: Benjamín Colsa

Fue en 1884 cuando se inauguraba en el municipio gaditano de Chiclana de la Frontera la colonia de Campano, una gran revolución en la época y un gran progreso, ya que contaba con 1.300 hectáreas, cuyo propietario era Manuel José Bertemati (1852-1935), marqués de Bertemati, perteneciente a una importante familia jerezana. y que conoció el esplendor vitícola de la colonia y su decadencia con los problemas de la filoxera. Sobre el marqués de Bertemati y Campano, la Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Chiclana editó un interesante libro sobre su historia “Mañana serán viñas. El marqués de Bertemati en Campano”, escrito por Cristina Díez Rodríguez y Carlos Maza Gómez”.

El gerente de Bodegas Manuel Aragón, el enólogo Sebastián Aragón, había leido y oído hablar sobre el marqués y sobre la uva gateta, una variedad que fue plantada en la finca que el marqués poseía y que le valió un galardón en la Exposición Universal Vitivinícola de Burdeos de 1895, ya que la colonia de Campano obtuvo una medalla de oro con el vino tinto ”Rouge Royal”.

Según la enciclopedia moderna, diccionario universal de literatura, ciencias, artes, agricultura, industria y comercio, publicada por Francisco de P. Mellado en 1855, la gateta es “una uva negra de racimo grande, con el grano claro, de pulpa y piel fuerte pero de jugo dulce. Su vid tiene la madera algo bronca y echa bastantes sarmientos, con la hoja grande y ancha y prueba en todo terreno, así en cepa como en parra. Es buena para comer, para guardar y para vino”.

La variedad de vid llamada gateta ha sido una variedad tinta cultivada en España en muchas regiones, y que, como tantas otras se han dejado de cultivar, por su rendimiento o por sus resultados enológicos. Sebastián Aragón se acercó hace 5 años al Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera, Centro IFAPA Rancho de la Merced, situado en el término municipal de Jerez, que tiene una gran colección de variedades de uvas y vió las cepas que allí tenían. Pidió unos sarmientos y los plantó en Campano, precisamente donde Manuel Aragón tiene sus viñas junto a la bodega. En la actualidad son 6 plantas las que están creciendo y con una producción de 2,5 kilos cada una.

Aragón señala que “Lo que hemos pretendido primero es recuperar la variedad gracias al Rancho la Merced que nos lo ha permitido, y luego plantar y sacar adelante una serie de plantas suficientes para hacer microvinificaciones para estudiar su viabilidad comercial. La planta muestra condiciones de adaptabilidad muy buenas y una maduración del fruto aceptable permitiendo unos resultados muy alentadores”.

El siguiente paso en este proceso de recuperación es aumentar el numero de plantas para así poder elaborar una cantidad de vino suficiente para hacer catas y estudio de comercialización.

Más información sobre las bodegas Manuel Aragón, el Sanatorio de Chiclana, aqui.

Botella de Rouge Royal y la portada del libro donde aparece el marqués de Bertemati.