Texto: Pepe Monforte
Si en Estados Unidos las grandes ideas surgen en los garajes, aquí, en la Bahía de Cádiz, los grandes proyectos surgen en un campo de Chiclana. Fue en Cerromolino, en el chalet de Eugenio Barea, médico y coleccionista de refranes, donde se creó el Grupo Gastronómico Gaditano. El y el publicista Pepe Longobardo juntaron a amigos y familiares aficionados a la cocina y así llegaron a juntarse hasta ocho que fueron los que asistieron a la comida de fundación del grupo. Fue el día 23 de abril de 1986, día del libro y no cabe duda de que el día fue de lo más indicado porque de los miembros de este grupo han salido ya varias publicaciones, entre ellas el best seller de la gastronomía de la provincia, la cocina gaditana de Carlos Spínola, uno de los fundadores del grupo.
La elección del lugar de la primera cena tampoco se hizo al azar. Se hizo en El Faro de Gonzalo Córdoba y el, el inspirador de la cocina gaditana actual, sería el que un año más tarde, en 1987, recibiría el primer premio anual del grupo en reconocimiento a su labor.
José Manuel Pérez Moreno, médico especialista en cuestiones de estómago y aficionado también a mantenerlo “cuidado”, es el actual presidente del GGG, como gusta que llamen al grupo. Destaca que no se hubiera hecho nada “sin Eugenio, porque el fue el que nos aglutinó y por eso luego le nombraríamos presidente honorario”.
Eugenio, que sigue formando parte del grupo, es uno de los siete que se mantienen desde la fundación. Destaca que “nuestra filosofía gastronómica se fundamenta en dar a conocer al mundo entero que nuestra cocina existe, que se consolida cada vez más y que tiene una firme estructura para el sector alimentario”.
José Manuel Pérez Moreno insiste en esta idea y señala “que la evolución de la cocina en la provincia en estos 20 años es brutal. Se ha mejorado muchísimo y me atrevería a decir que ahora es uno de los principales atractivos turísticos de la zona”. Pérez Moreno sabe bien de lo que habla. En estos 20 años han visitado más de cien restaurantes de la provincia. “No solo vamos a comer. No niego que nos lo pasemos magnificamente, pero siempre anunciamos nuestra visita y pedimos al cocinero que elabore algún plato novedoso o haga su versión de un clásico de la zona”.
Procuran que en cada visita que realizan el cocinero, al final, se siente a la mesa y hable sobre los platos degustados. Luego, ya en secreto, los miembros del grupo puntúan a cada restaurante. Los resultados quedan sólo para los socios. El grupo cuenta con sus propios estatutos basados en los de una sociedad gastronómica vasca y a lo largo de su ya larga vida ha ido viendo como sus actividades se han ido ampliando hasta convertirse en referencia de la gastronomía gaditana. Los estatutos establecen que son 15 los miembros del grupo. Todos son hombres. Pérez Moreno dice que es así “casi por casualidad. Porque somos un grupo de amigos”.
A las espaldas de los miembros del grupo hay ya casi una decena de libros de cocina. El más fecundo ha sido Carlos Spínola, pero también han publicado Manuel Fernández Trujillo y ahora, con su cocina para mayores, Julio de la Torre y José Manuel Pérez Moreno. Mariano del Río ha ejercido incluso de crítico gastronómico para La Voz de Cádiz y es una de las firmas habituales en otra de las mayores contribuciones de estos gastrónomos a la cocina de Cádiz su página web www.grupogastronomicogaditano.com
La página fue creada en 1997 y su artífice, también premio anual del grupo, es José Luis Flores. Además de recetas contiene una serie de trabajos de investigación del propio grupo sobre temas de gastronomía, además de divulgar las actividades del GGG.
Ahora publicarán otro libro, los terceros cuadernos de gastronomía, que presentarán el día 5 de abril en el Casino Gaditano, en una fiesta en la que conmemorarán los 20 años del grupo y entregarán el premio anual, este año dedicado a Jesús Martín, el creador de la ruta de la tapa de Cádiz e impulsor de este tipo de acontecimientos en la provincia. Los terceros cuadernos recogerán unas 40 recetas, muchas de ellas de lo que podríamos llamar la nueva cocina gaditana.
El grupo trata de difundir también la cocina con sus talleres veraniegos acogidos a los cursos de Verano de la Universidad de Cádiz y ellos mismos hacen sus pinitos en las reuniones mensuales que mantienen en el restaurante Achuri de Cádiz en el que cocinan los platos que van a degustar.
Actualmente mantienen dos reuniones mensuales. Una en el Achuri, en la que cocinan ellos mismos y otra en un restaurante distinto cada mes. Además cada verano realizan una ruta gastronómica de dos días junto a sus familias y desde hace varios años asisten “en peregrinación” a la Casa del Mar de Barbate para celebrar la llegada del atún rojo de almadraba en una degustación que ha llegado a tener cerca de 20 platos diferentes.
Pérez Moreno resalta “que el grupo está más vivo que nunca. Estamos abiertos a colaborar con todos aquellos que quieran promocionar la cocina gaditana y queremos resaltar que no sólo somos un grupo de amigos que se reúnen a comer. Tratamos de divulgar una cultura que cada día nos parece más digna de atención y es la cocina gaditana”.