La heladería Nova Piccola de Cádiz ofrecerá este año en las fiestas navideñas un helado realizado con pan de oro comestible y chocolate

Nova Piccola hace sus helados de forma artesanal con frutas frescas. Foto: Cosas de Comé.

Esperan tenerlo a la venta en los próximos días y será “el helado de oro” de estas navidades. Lo hacen con helado de chocolate al que añaden una pequeña cantidad de pan de oro comestible.  Luego por encima el toque de glamour, un poco de polvo de oro, también comestible, para darle color a la cosa.

Es la última creación de Carlos Sancho, un joven de 22 años y su padre, del mismo nombre. Se ocupan, junto a más familiares, de Nova Piccola, una heladería artesanal que abrió hace ya 3 años en plena Avenida principal de Cádiz (Avenida Ana de Viya número 19. Teléfono: 654136769)

El primero de ellos forma parte ya de la tercera generación de heladeros de la familia y acaba de coger el relevo en la elaboracióna artesanal de estos productos. La idea de ambos es sorprender al público para estas fiestas con una gama de helados novedosos. Son conscientes de que en Cádiz no es habitual tomar helados durante las fiestas y por eso crean sabores acordes con la temporada para impulsar su consumo. Así además de esta novedosa propuesta, inédita hasta ahora en la ciudad, incorporarán otras especialidades navideñas como uno de pestiños al estilo de Bornos, basado en una fórmula familiar de este dulce y otro de mazapán. Además realizarán otra línea basada en bebidas como uno  de gin tonic, otro de mojito y un tercero de sorbete de limón al cava. Carlos Sancho destaca que “sólo empleamos productos naturales, nada de saborizantes. El de pestiños lleva pestiños de verdad que se mezcla con el helado y cuando hacemos el de gin tonic es eso lo que le añadimos”.

C arlos Sancho señala que el precio del “helado de chocolate y pan de oro no será muy caro. Será tan sólo un poco superior a los demás porque lo que lleva es muy poco oro y además queremos promocionarlo”.

Los Sancho empezaron con los helados allá por año 1962 cuando Emilio Sancho, el padre de Carlos, abrió en la calle San José el Bar Piccola. Venía de la Heladería Los Italianos de Cádiz, la de la calle Ancha, donde había aprendido a hacerlos. En la calle San José se hizo famoso también por sus helados hasta que el negocio pasó ya a manos de su hijo Luis que lo rige en la actualidad aunque ya no tiene helados. Sin embargo, los Sancho, han seguido la tradición familiar y en el año 1987 abrían en el centro comercial de Vista Hermosa la heladería Nova Píccola que mantienen en la actualidad, aunque sólo la abren en temporada, desde el día de San José, en marzo, hasta octubre. En el 2007 se unía el nuevo local de la avenida donde también ofrecen servicio de desayunos y meriendas, además de los helados, con tartas, bollería y algunos dulces.

Para la Navidad contarán con una lista de especialidades específica, que comenzarán a elaborar a partir de la próxima semana. Así tendrán helados de chirimoya, mazapán, pestiños de Bornos, mojito, turrón , pasas en aguardiente, chocolate “Doratto”, gin tonic “Sapphire”, Baileys, turrón de chocolate, sorbete de limón, sorbete de limón al cava o sabores tradicionales como vainilla, avellana o nata con nueces.

Los helados se pueden tanto tomar en el local como comprarse en tarrinas de varios tamaños para llevar a casa y así poder disfrutarlos en las comidas navideñas. La heladería estará abierta tanto el día 24 como el 31 para que las personas que lo deseen puedan comprar y retirar los helados para las fiestas. Más información en el teléfono 654136769 o en el correo electrónico novapiccola@gmail.com

Carlos Sancho junto a una de sus creaciones y las tarrinas en las que venderán los helados para llevar, para que así puedan tomarse durante las comidas de Navidad. Foto: Cosas de Comé.