Texto: Pepe Monforte
La gastronomía se está convirtiendo en uno de los pilares del centro de Jerez al que no paran de llegar firmas potentes del sector en la ciudad, empresas que empiezan a confiar en la zona y se instalan en ella. Los dos últimos en llegar han sido el restaurante Antonio, propiedad de Antonio García Chica, uno de los hijos del creador de la famosa Venta Antonio, que acaba de abrir un restaurante y bar de tapas en la calle San Dionisio esquina con la plaza de la Asunción. Asimismo también acaba de abrir en la calle Consistorio, en los números 6 y 8, la heladería y turronería Soler, otro clásico de la ciudad.
Con estas dos nuevas incorporaciones el número de establecimientos que ofrecen gastronomía de primer nivel en la zona se eleva a la quincena. Varios empresarios consultados por Cosasdecome coinciden en señalar que “estas calles han recuperado atractivo para el público porque creemos que la oferta es interesante y eso está atrayendo a nuevos hosteleros. La competencia es buena, sobre todo si viene gente de categoría, como está ocurriendo”, puntualiza uno de los veteranos de la zona. De hecho estas dos aperturas no han sido las únicas en el año. En abril abría también en la calle Consistorio el restaurante Kiri, el conocido coreano de Jerez, un local también de prestigio en la provincia dentro de este tipo de comida. También en la plaza de la Asunción abrió Las Cuadras, una cuidada taberna ubicada en un inmueble del siglo XIX. En 2013 fue el cocinero Julián Olivares con Albores el que también se asentaba en la calle Consistorio. A ello hay que unir remodelaciones y modernizaciones de establecimientos.
Adrián Bravo, socio de García Chica en el restaurante Antonio, que abrió en el pasado mes de abril en la avenida Tío Pepe, señala que el hecho de que hay ofertas hosteleras muy interesantes en el centro les ha impulsado a poner un nuevo establecimiento en la zona. En concreto se han hecho con el local que ocupaba hasta hace unos meses el “Mesón El Cabildo”. El local lo han remodelado y le han quitado su aire de mesón para darlo otro más luminoso, moderno y más parecido a una cervecería, más acorde con la oferta gastronómica de Antonio, basada en los productos de mercado y, sobre todo con una oferta de pescados y mariscos frescos y chacinas de calidad. Adrián señala que la oferta que ofrecerán en el centro, en el que ya regentaron este mismo local hace unos quince años, será idéntica a la del local que abrieron en abril en la avenida del Tío Pepe. Tienen una carta de tapas y otra de restaurante aunque ambas están disponibles en todo el local, tanto en los salones interiores, donde hay mesas altas y bajas, como en la terraza, un atractivo espacio situado en una especia de pequeña plaza con árboles en la plaza de la Asunción.
En la actualidad (marzo de 2016 el establecimiento) está ya gestionado sólo por Adrián Bravo.
El establecimiento, que se inauguró el pasado día 7 de diciembre, abrirá todos los días desde las once de la mañana y hasta después de las cenas. Su teléfono es el 629259985.
A pocos metros, en la calle Consistoria 6 y 8, ha abierto otra firma muy conocida en Jerez, la heladería y turronería Soler. En concreto lo hace de la mano de Marcos Soler, nieto de Enrique Soler, el fundador de la heladería jerezana situada en la calle Rosario. La oferta de Soler ahora se centra en los famosos turrones que hace la casa, del duro y del blando, al estilo de Alicante ya que de allí era su abuelo que se trajo hasta el sur tanto la técnica de los turrones como de los helados. Este es el segundo elemento de atracción del establecimiento, los helados, que también elaboran ellos. A esto une también tartas y dulces para merendar.
La heladería y turronería es también cafetería. Tiene algunas mesas en el interior aunque lo fuerte será su terraza en la calle Consistorio lo que permitirá disfrutar de los helados en las noches veraniegas en pleno centro de la ciudad. Marcos señala que aún “el local no está terminado. Estamos ultimando los detalles de decoración y falta todavía el nombre que será La Granja de Soler”, recuperando el nombre del mítico establecimiento que tuvo su abuelo en la calle Larga y que existió desde la década de los 40 hasta la de los 70 del siglo XX. El escritor jerezano Juan de la Plata, en su libro “Los tabancos y ventas de Jerez” se refiere al café, que estaba situado en la calle Larga número 15 como “un café con un buen salón, muy eleganta y señorial, con amplias puertas de cristaleras y con numerosos veladaores ante la fachada del msimo, en la acera de la calle, atendidos por los mejores camaraeros que haya habido en esta ciudad en muchos años”.
La idea de Marcos Soler es incrementar también la oferta de productos. Por el momento el establecimiento, con teléfono provisional 670840723, abre, y hasta que terminen las fiestas, todos los días desde las doce del mediodía hasta el cierre por las noches.
Con estas dos nuevas incorporaciones la zona del centro de Jerez se convierte en una de las dos zonas “gastronómicas” punteras de la ciudad en competencia con otra zona que ha adquirido gran auge en los últimos año, la situada en la avenida de Domecq, en las inmediaciones del parque González Hontoria donde en los últimos años y uniéndose a establecimientos muy conocidos com La Tasca o la marisquería Gran Avenida se han unido otros nombres de prestigio como el Val de Pepe, de Pepe Romero Valdespino, La Espartería de Javier Parra, la reapertura de Las Bridas de Manolo Sierra o la cervecería La Rosaleda, del grupo del Hotel La Cueva.
Estos son los 16 establecimientos de atractivo gastronómico del centro de Jerez (pulsando sobre el nombre de cada uno hay más información y datos de localización):