Foto: Cosas de Comé

Nombre del descubrimiento: Coca de merengue

Lugar:  Confitería Linero (Calle García Lorca número 2. Teléfono: 956130718) en Olvera.

Día del hallazgo: Domingo 12 de junio de 2011.

Tapatólogo descubridor: Paco Medina, tapatólogo de la demarcación de Olvera

Apartado científico: Meriondología. (Ir a la tapapedia para obtener información sobre esta ciencia). Dentro de la meriondología se adscribiría al área de Merenguismo bigotoso. El merenguismo científico no debe confundirse con el merenguismo futbolero ultimamente amouriñado. Se trata de una ciencia empírica que aprecia la suavidad de la crema. Lo de bigotoso viene del gusto por los estudiosos de esta disciplina por dejarse marcas de su investigación en la parte de la cara que va entre la nariz y la boca…se arregla con un lengüetazo con un poquito de disimulo.

La confitería Linero de Olvera está en una calle estrechita, un poquito escondida del casco antiguo, con lo que encontrarla ya le produce al tapatólogo cierta sensación de estar ante algo indómito con la morbosidad científica que ello supone. Las dependencias de la confitería, pequeñita y casera, te confirma aún más esa sensación. Y es ahí cuando ya se te aparece tras el cristal los merengues de la confitería que tienen fama en toda la Sierra. Los hay de dos clases: la milhoja de merengue que es un taco de esos cuadrados (como el cubo de Cubrik pero en merengue) que tienen un gran pegotón de exquisito merengue en medio de dos especies de galletas hojaldradas y después está el escogido para este estudio que es la coca de merengue. En esta ocasión el pegotón merengoso, se coloca artisticamente con manga pastelera dentro de una empanadilla de hojaldre que se abre por la mitad, como un viena, pero para introducir el relleno, un suave y nada empalagoso merengue de los de verdad, de esos que no se puede comer con cuchara sino metiendo hasta la nariz en la cremita. La fórmula tiene ya cerca de 40 años. El primero en hacerlo fue Antonio Linero García que allá por 1973 inauguró esta pequeña pastelería de Olvera en unión de dos de sus hijas. Antonio dejó el campo para dedicarse al mundo del dulce y hasta Olvera vino para ayudarle Pedro, un amigo suyo que había sido pastelero en la famosa pastelería sevillana de La Campana. Luego la fórmula la aprendieron sus hijos Antonio y María Teresa Linero Cantalejo que son los que los hacen en la actualidad con la fórmula magistral que aprendieron de su padre. Además de estos hojaldres la confitería también hace merengue de café. Los dulces se hacen practicamente a diario y la confitería abre todos los días.

Otros dulces de interés tapatológico en la Confitería Linero: Las caracolas de crema.

El artesano Antonio Linero Cantalejo hace junto a su hermana María Teresa los merengues de Linero. Foto: Cosas de Comé.